El cambio de aceite consiste en sustituir el filtro de tu coche, vaciar el aceite usado y llenar el depósito correspondiente con nuevo aceite. No es poca cosa y hacerlo es fundamental para mejorar el rendimiento del coche, pero desde luego no es lo mismo que la revisión, aunque ésta puede incluir o no un cambio de aceite, si es necesario, ¿me explico?
De hecho, la revisión consiste en verificar en cada coche una serie de puntos a través de unas pautas facilitadas por Audi y personalizadas para cada vehículo, ya que para obtenerlas hay que identificar primero el coche por su número de chasis y revisar diferentes aspectos dependiendo de sus kilómetros.
A continuación vamos a detallar estos puntos para que la próxima vez que pasemos una revisión tengamos claro qué incluye y qué no incluye.
– Se revisan los sistemas eléctricos del vehículo con el equipo de diagnosis de Audi.
– Revisamos la suspensión y los frenos, a través de una máquina específica para realizar estas mediciones.
– Realizar una comprobación visual para detectar daños en la pintura y corrosión, en el interior y exterior con las puertas y el capó abierto.
– Comprobación del funcionamiento de alzacristales, cinturones de seguridad, clima, radio, etc.
– Comprobación del estado y presión de los neumáticos, incluido el de repuesto.
– Se revisan los bajos del vehículo.
– Comprobación de las pastillas de freno.
– Revisamos el estado del vano motor para detectar posibles fugas, así como el grado de congelación del anticongelante y cambio de aceite.
– Prueba dinámica en carretera.
– Lavado y aspirado del vehículo.
Como podemos apreciar, el cambio de aceite no es más ni menos que lo que su propio nombre indica, mientras la revisión puede incluir el cambio de aceite pero además implica una serie de trabajos y medidas con el propósito de comprobar la seguridad del conductor y de sus acompañantes.