La posibilidad de pinchar una rueda parece proporcional a la prisa que tienes por llegar a tu destino y a las condiciones climatológicas. Desconocemos por qué pero cualquier conductor habitual sabe que lo más probable es que la lluvia, el frío y la prisa estén presentes cuando pinches. Ármate de paciencia para conducir despacio (si puedes) e intenta alcanzar un lugar, a poder ser llano y seguro donde colocar el coche, lejos del tráfico.
El primer paso es ponerte el chaleco reflectante, encender las luces de emergencia y colocar los triángulos, después debes meter primera y tensar al máximo el freno de mano. Hecho esto, entremos en materia:
1) Coge la rueda de repuesto -comprueba que está inflada-, después coge el gato y la llave para quitar los tornillos. Quita el tapa cubos y afloja un poco las tuercas de la rueda antes de levantar el coche.
2) Levanta el coche hasta que la rueda apenas roce el suelo, la medida y el lugar donde colocar el gato va en función del coche y están indicados en su manual, consúltalo. Una vez que esté lo suficientemente levantado, desenrosca los tornillos siempre en diagonal y quítalos. Pon la rueda pinchada debajo del coche, así actuará como una protección en el caso de que el gato resbale.
3) Cambia la rueda. Pon el neumático de recambio y enrosca las tuercas a mano. Asegúrate de que está bien puesta y que gira bien. Pon los tornillos en diagonal y apriétalos del todo con la mano. Baja el coche con el gato hasta que la rueda de repuesto toque el suelo. A continuación, usa la llave de tubo para apretar un poco más los tornillos, sin terminar la acción del todo. Retira la rueda pinchada de debajo del coche, termina de bajarlo y quita el gato. Ya puedes apretar los tornillos fuertemente.
4) Recoge la rueda pinchada y colócala en el maletero o donde corresponda junto con las herramientas y listo.
Ahora que ya has salido del aprieto, fíjate en la cantidad de aire que tiene la rueda recién cambiada, es probable que tenga poco, en ese caso circula con precaución. Por otro lado, vete planeando cambiar la rueda pinchada cuanto antes porque nada te libra de volver a pinchar.
En el caso de que tengas un Audi tienes otra opción mucho más cómoda. Llamar a Audi Class y que ellos te cambien la rueda, estés donde estés, en menos de 30 minutos. Si el pinchazo se produce dentro de España el teléfono de contacto es: 900.320.333. Si estás fuera de España, en cualquier punto de Europa, tranquilo, solo tendrás que llamar al 34. 91.593.86.90. ¿Mucho más cómodo, verdad?