La realidad virtual ya es una parte más de los concesionarios de Audi. Bajo el nombre de Audi VR experience, las tecnologías digitales están cada día más integradas en el sistema de trabajo de la red oficial de oficinas Audi.
A través de unos innovadores cascos de realidad virtual los clientes podrán ampliar los servicios de asesoramiento al tiempo que configuran el vehículo según sus preferencias de forma casi tan real como sería verlo como verlo in situ. Este nuevo dispositivo permitirá ver toda la gama completa de Audi además de todas las posibles combinaciones de equipamiento.
Con el claro objetivo de mejorar la experiencia de cada cliente y dar un servicio aún más completo, la marca de los cuatro aros presentó su nueva solución tecnológica en el Salón Internacional del Automóvil de Detroit. Durante el encuentro, Luca de Meo, miembro del Consejo de Dirección de Audi AG y responsable de Ventas y Marketing, presentó la Audi VR experience como un servicio que permite que los posibles compradores experimenten el mundo virtual de Audi “en un nuevo nivel. En tres dimensiones, con todos los efectos de sonido y casi igual que en la vida real”.
Una vez que el usuario se coloca las gafas, una cámara sigue los movimientos de cabeza y el sistema adapta la imagen que se proyecta. De forma virtual, los clientes podrán sentarse al volante del vehículo que imaginaban al poder configurarlo individualmente, echar un vistazo al interior del maletero y configurar su coche de forma totalmente personalizada: desde la elección de los colores, la materia interior, los tipos de cuero, molduras decorativas, los diferentes sistemas de información y, por supuesto, de entretenimiento. Gracias a unos auriculares Bang & Olufsen de alta gama se transmite toda la de información acústica. Con ello, el cliente podrá disfrutar del inigualable sonido del motor de un Audi o de percibir el cierre de las puertas, entre otras experiencias.
Primer software de realidad virtual automovilística
Con la Audi VR experience, la marca automovilística alemana se convierte en el primer fabricante de coches que desarrolla una solución de software integrada en cascos de realidad virtual y específica para los concesionarios. Un primer paso que se irá completando a lo largo de año y que aspira, en una fase más avanzada, a ofrecerse como una solución móvil fuera de los concesionarios, por ejemplo, visitando al cliente en su propia casa.