El Audi Aicon supone un primer acercamiento al concepto del automóvil de prestigio del mañana, un vehículo que aviva los deseos de los usuarios más exigentes.
Diseño exterior: Pura presencia
El Audi Aicon resulta espectacular desde cualquier ángulo de visión. Su tamaño imponente (longitud de 5.444 mm y anchura de 2.100 mm) y una altura de 1.506 m lo sitúan en el nivel máximo del automóvil, el segmento D. La distancia entre ejes es de 3.470 mm, 240 más que la versión con carrocería larga del nuevo Audi A8.
El elemento central del exterior es la parte que da forma al habitáculo. Amplias superficies acristaladas delante y detrás, así como ventanillas laterales significativamente convexas, crean una luminosa extensión de espacio para los ocupantes. Un pliegue distintivo traza una tensa línea junto a las ventanillas del Aicon hasta su pilar D posterior, rasgo sin precedentes en el diseño automovilístico. Dicha línea enfatiza el tamaño del coche y reduce eficientemente el volumen aparente del habitáculo en relación al conjunto de la carrocería. Los bajos laterales oscurecidos ascienden sutilmente hacia atrás, dando la sensación de que el coche está inclinado hacia delante.
Tecnología LED de iluminación, emoción e información
Agrupados en torno a la parrilla Singleframe se concentran amplios campos lumínicos en los cuales, y al igual que en la zaga, se disponen más de 600 píxeles 3D. La amplia superficie y el alto número de píxeles posibilitan una gran versatilidad de gráficos, animaciones y visualizaciones informativas en cualquier color.
El Audi Aicon ayuda a su entorno de forma inteligente y utiliza animaciones en sus superficies de comunicación para avisar a peatones o ciclistas de situaciones peligrosas. Modos de conducción como rodar en convoy, en ciudad o a muy baja velocidad pueden visualizarse. Tiras lumínicas horizontales se mueven de abajo hacia arriba cuando el coche acelera y en el sentido opuesto cuando frena. Su velocidad de movimiento aumenta o disminuye acompasadamente con la velocidad del coche.
Un elemento que un futuro vehículo de conducción autónoma definitivamente ya no necesitará son los faros de largo alcance. El sistema de sensores láser y de radar del Audi Aicon también “ve” lo suficiente incluso en la oscuridad, puede encontrar la dirección correcta y detecta a tiempo posibles obstáculos. Y mientras tanto, los pasajeros pueden usar los servicios suministrados por myAudi, o incluso cerrar los ojos durante un período de tiempo. Cuando los ocupantes salen del Audi Aicon en la oscuridad, una “luz de acompañamiento” se activa automáticamente, y un mini dron con linterna ilumina con seguridad el desplazamiento a pie del usuario.
Interior: espacio, forma, función
El Audi Aicon dispone de puertas opuestas que abren unas hacia delante y las otras hacia atrás; por lo tanto, no hay pilar B. Así, cuando acceden, los pasajeros cuentan con la anchura interior completa. En el habitáculo, las líneas de las superficies decorativas y elementos funcionales son marcadamente horizontales. Mostrándose más ligero de abajo arriba, el interior refuerza una gran impresión de espaciosidad; y la ausencia de volante o de un salpicadero clásico crea una enorme sensación de transparencia y amplitud. Esto queda realzado por la gran superficie acristalada, el techo transparente y la baja línea de cintura, sin olvidar la geometría especial de las ventanillas laterales. Su parte superior se orienta claramente hacia fuera, y así la anchura máxima interior queda a la altura de los ojos.

El interior parece ser especialmente ancho cuando los dos asientos delanteros son situados lo más atrás posible. El Audi Aicon es un 2+2 plazas. Una banqueta tapizada con dos asientos se integra en la parte posterior. Los dos asientos delanteros han sido diseñados para un máximo confort y una amplitud óptima. Los ocupantes pueden hacerlos deslizar longitudinalmente hasta 500 mm entre las dos posiciones más alejadas delante o detrás. Los asientos no se desplazan sobre raíles, sino sobre una plataforma cubierta de moqueta que puede moverse en sentido longitudinal, y en la que reposan también los pies de los ocupantes. La altura de la plataforma es variable, de modo que puede usarse como un diván con las piernas estiradas. La inclinación del cojín y del respaldo puede regularse en infinitas graduaciones para obtener una confortable postura de trabajo o de descanso.
Los asientos individuales pueden girarse respecto a su orientación longitudinal en hasta 15 grados. Girar los asientos hacia fuera hace aún más fácil el acceso a ellos. Girándolos hacia dentro, se facilita que los pasajeros conversen o interactúen. Si los pasajeros se vuelven, los reposacabezas se pliegan hacia atrás en ángulo recto, convirtiéndose en un apoyabrazos. La arquitectura de los asientos es como una reinterpretación de una pieza clásica de mobiliario, la chaise longue.
Propulsión y suspensiones: optimizadas para largas distancias
Ya la propia forma del Audi Aicon concept revela que es un coche de otro mundo, un automóvil del futuro. La tecnología aplicada en este vehículo ha sido diseñada sistemáticamente para ese mundo. También entraña una infraestructura de transporte en la que los vehículos de conducción autónoma se dan por supuestos. Los usuarios de las vías públicas estarán conectados mutuamente y con el entorno.
Eso supone también que el tráfico será menos ajetreado y fluirá más suavemente en el futuro de lo que hoy nos imaginamos. Incluso con límites de velocidad moderados, las distancias largas podrán cubrirse a una velocidad constante de unos 130 km/h. Los pasajeros experimentarán el desplazamiento como un confortable crucero sin frecuentes frenadas ni acelerones. Los accidentes también serán cosa del pasado gracias a los sistemas de sensores altamente avanzados y a la conexión en red. Los ocupantes de un coche como el Audi Aicon no necesitarán, por tanto, elementos convencionales de retención o de protección. Experimentarán una sensación física de libertad durante su desplazamiento que en 2017 aún se antoja visionaria.
La propulsión y el conjunto del vehículo también han sido adaptados óptimamente a este nuevo mundo de movilidad. Un sistema eléctrico altamente eficiente posibilita el dinamismo del Audi Aicon. Cuatro motores eléctricos en total se sitúan en la zona de los ejes delantero y trasero. Las unidades de almacenamiento de energía van integradas debajo del suelo de la cabina. Son baterías de carcasa sólida con mucha más capacidad energética que las baterías de iones de litio.
Los cuatro motores producen un total de 260 kW (354 CV) y 550 Nm. Cada uno mueve una rueda, posibilitando una tracción integral quattro variable, con control electrónico. La aceleración máxima no se ha tenido tan en cuenta en las especificaciones como la máxima eficiencia energética y, consecuentemente, la autonomía entre recargas. Esta estrategia operativa también influye en el conjunto propulsor y los frenos eléctricos, que aplican recuperación para reciclar energía. La construcción ligera multimaterial y la aerodinámica optimizada también contribuyen a lograr autonomías de entre 700 y 800 kilómetros con una carga de las baterías.
FUENTE: AUDI